Este año regreso a esta fiesta, el año pasado estaba trabajando con un encargo en la Bajada de la Virgen de las Nieves, La Palma, y aunque eché de menos la situación, el descanso me venía bien, muchos años seguidos haciendo el mismo tema, creativamente, puede complicar mucho el trabajo.
Con algo más de fuerzas venía con la intensión de lograr una imagen que había hecho hacía unos años, en la embarcación del 2014.
La imagen, las imágenes, eran desde dentro del barco de la embarcación… jodido.. ya .. la Nueva San Ramón.
El paseo por la Ranilla es de obligado paso para mi, año tras año:
Uno de los detalles que más complican este trabajo, es el aparcamiento, la maldita logística.
El Puerto de la Cruz es el municipio más pequeño de la isla de Tenerife, 8,73 km2, chiquito.. y a la fiesta asisten alrededor de 25.000 personas .. para aparcar a una distancia prudencial y teniendo en cuenta el equipo que cargo y que debo enviar la producción inmediatamente, suelo llegar a las 9 am.
La embarcación, el instante que “más funciona” ocurre sobre las 19,30 h.. son muuuuuchas horas.
La Cucaña: caminar por un palo impregnado en grasa pesada e intentar coger una de las tres banderas que están al final.
Llega el instante, la procesión de la virgen se acerca a la playa, ocurre la magia y me permiten subir al barco de la virgen.
Transcurren unos 45 min, o más, hasta que San Telmo y la Virgen del Carmen logran llegar a los callaos de la playa, mientras, concentración dentro de la embarcación. Los marineros muy emocionados, es SU PATRONA.
Una decena de hombre tiran de un gran cabo y acercan la embarcación a la playa y ..
No tengo palabras suficientes para agradecer a los responsables de la Nueva San Ramón y a los Costaleros de la Virgen del Carmen la ayuda que me prestaron.
Ojalá lean este post y les llegue. GRACIAS!!
Igualmente, a cada una de las personas que me permitieron pasar y moverme a pesar del poco espacio que teníamos.